10 bosques autóctonos que tienes que visitar en Galicia

¿Quieres descubrir la magia natural de Galicia? El verde de la vegetación de esta húmeda región es sin duda una de sus señas de identidad y a través de los diez bosques imprescindibles en Galicia entenderás el motivo. Desde la frondosa Fraga de Catasós hasta las Fragas do Eume, cada rincón ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza. En este artículo, te guiamos por los mejores bosques gallegos, ideales para senderismo, fotografía y conexión con la biodiversidad local. Prepárate para una aventura inolvidable en los bosques más encantadores de Galicia, perfectos para tu próxima escapada ecológica.

Fraga de Catasós, monumento natural

Comenzamos el repaso por los mejores bosques de Galicia hablando de la Fraga de Catasós, situada en las afueras de Lalín. Es un Monumento Natural protegido que ofrece un refugio de biodiversidad gallega. Este bosque autóctono alberga majestuosos robles y castaños, algunos de los más altos de Europa, plantados en el siglo XIX para aprovechar su madera noble. Con una extensión de 5 hectáreas, el área está señalizada y cuenta con paneles informativos sobre su historia y especies. La ruta circular, apta para toda la familia y ciclistas, permite explorar este paisaje cambiante según la estación. Un castaño caído, con 270 años de historia, revela la longevidad del bosque.

Teixadal de Casaio, el más antiguo de Galicia

El Teixadal de Casaio, en Carballeda de Valdeorras, es el bosque más antiguo de Galicia, ubicado en el Macizo de Pena Trevinca. Este bosque de tejos, único en la región, se formó hace más de 400.000 años de manera natural y cubre unas dos hectáreas. Además de tejos, alberga avellanos, acebos, robles y fresnos. Se puede llegar a través de diferentes rutas de senderismo o bicicleta de montaña, que son desafiantes pero recompensantes. El Teixadal de Casaio está catalogado como Formación Singular de Galicia y ofrece una experiencia única en un entorno milenario.

Souto de Rozavales y el castaño de Pumbariños

En Manzaneda se encuentra el hermoso bosque del Souto de Rozavales, un Monumento Natural desde 2000. Este bosque de dos hectáreas está dominado por castaños centenarios, ofreciendo un entorno sereno con bancos y mesas para descansar. Accesible desde el centro urbano de Manzaneda, cuenta con un aparcamiento cercano.

El lugar, uno de los bosques más bonitos de Galicia, destaca por el Castaño de Pumbariños, un árbol milenario con un perímetro de más de doce metros y una altura de seis a ocho metros. Este ejemplar, aún fructífero, es uno de los más antiguos de Galicia y está protegido debido a su avanzada edad y delicada salud.

Devesa da Rogueira ofrece rutas y buenas vistas

La Devesa da Rogueira, en Folgoso do Courel, es un bosque de 300 hectáreas en la vertiente norte del pico Formigueiros, lleno de diversidad natural. Sus rutas de senderismo, desde el Aula de la Naturaleza de Moreda o el Alto do Couto, ofrecen vistas panorámicas y recorridos para todos los niveles. El bosque alberga una variedad de árboles y fauna, con espectáculos naturales cambiantes en cada estación. Destacan lugares como las Fontes do Cervo y la cueva de Arcoia. Reconocido por su conservación y sostenibilidad, es parte de la Red Natura 2000 y posee la certificación del FSC. Por todo ello lo consideramos uno de los bosques gallegos que debes conocer.

Bidueiral de Montederramo y sus leyendas

Nos vamos ahora hasta Montederramo, provincia de Ourense, para conocer el Bidueiral de Montederramo, otro de los más bellos bosques gallegos. Este es un bosque diverso poblado por abedules, acebos, robles y una variada fauna. Este lugar, una vez vital para la carpintería local, también es conocido por la leyenda de Manuel Blanco Romasanta, el infame hombre lobo del siglo XIX. Su historia, entre lo entrañable y lo oscuro, aún evoca misterio en las noches de luna llena en este bosque único.

Fraga da Marronda con gran diversidad de flora y fauna

Y entre las fragas más bonitas de Galicia está también la de Marronda. Ubicada en Baleira, es un bosque autóctono gallego que forma parte de la Reserva de la Biosfera Río Eo, Oscos y Terras de Burón, y la Red Natura 2000. Con sus 610,64 hectáreas, este tesoro natural ofrece un espectáculo único en cada estación, con hayas, castaños, robles centenarios y una diversidad de fauna. El río Eo serpentea por el bosque, creando cascadas y meandros, y la ruta da Marronda-Alto Eo permite explorar este paraíso con vistas panorámicas y pueblos tradicionales en un recorrido de 21,5 kilómetros.

Bosque de Secuoyas de Poio y su conexión con América

Además de ser uno de los bosques más interesantes de Galicia, es también uno de los que tienen una historia más original. Ubicado en Poio, las conexiones con América se evidencian en el Bosque de Colón, donde medio millar de secuoyas rojas, regalo del presidente George Bush en 1992, honran el supuesto nacimiento de Cristóbal Colón en este pueblo gallego. Jóvenes estadounidenses plantaron estos árboles como un gesto de hermanamiento entre continentes. Este bosque, también conocido como Bosque de Colón, podría albergar los árboles más altos de Europa en unas décadas. Situado en el Monte Castrove, este enclave cuenta con diferentes áreas recreativas, aunque su uso ha disminuido con el tiempo.

Souto da Retorta y sus impresionantes eucaliptos

El Souto da Retorta, en la parroquia de Chavín en Viveiro, destaca por sus imponentes árboles, conocidos como el eucaliptal de Chavín o el bosque de los gigantes. Este espacio protegido, designado como Monumento Natural, alberga unos 600 ejemplares de eucalipto, algunos centenarios, plantados a finales del siglo XIX para mejorar las condiciones de drenaje. Una ruta de aproximadamente dos kilómetros junto al río Landro permite admirar estos árboles y descubrir las cascadas y la vieja fábrica de la luz de Chavín. Destaca "El Abuelo", un eucalipto de 67 metros de altura y diez metros y medio de perímetro en la base, considerado el árbol más grande de España y protegido para su conservación.

Fragas do Eume, un Parque Natural

Resulta imposible hacer un repaso de los mejores bosques en Galicia sin hacer mención al segundo Parque Natural de la comunidad en tamaño; las Fragas do Eume. Este espacio natural compartido entre diferentes concellos abarca 9.125 hectáreas. Es un bosque atlántico costero o de los más y mejor preservados en toda Europa. En su centro se encuentra el monasterio de Caaveiro, que ofrece vistas impresionantes del entorno. El río Eume serpentea a través del parque, formando un cañón rodeado de neblina. Aquí, helechos, robles, castaños y abedules comparten hábitat con más de cien especies de aves y cuarenta mamíferos. Además, la presencia de restos prehistóricos y monumentos medievales añade un toque histórico al paisaje. Si decides visitarlo, asegúrate de explorar los cinco miradores que ofrecen una variedad de colores durante todas las estaciones del año.

Monte Aloia con vistas al valle del Miño

Ponemos punto y final a este conjunto de bosques que forman el grupo de bosques, fragas ydevesas más bonitas de Galicia, reclamando la belleza de una zona verde ubicada cerca de la frontera con Portugal; el Monte Aloia. Es este el primer parque natural declarado en Galicia, abarcando 746 hectáreas entre los municipios de Tui, Tomiño y O Rosal. Con alturas que alcanzan los 631 metros, este parque ofrece cerca de 10 kilómetros de senderos para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre, como el senderismo. En su interior, se encuentran especies arbóreas autóctonas y foráneas, destacando abetos, cedros del Líbano y cipreses. Desde sus miradores, se pueden disfrutar de vistas panorámicas del valle del Miño y los Montes da Groba. El parque alberga una diversa fauna, como zorros, conejos, águilas ratoneras y azores, y cuenta con la Casa Forestal, convertida en Centro de Recepción de Visitantes, que ofrece una exposición sobre la historia del parque y sirve como punto de partida para numerosas rutas de senderismo.