El Balneario de Carballo pone a disposición de sus huéspedes una avanzada tecnología en tratamientos termales y un amplio abanico de soluciones terapéuticas, avalado por una tradición milenaria que se remonta a la época de los romanos o los árabes. Sus instalaciones disponen además de un hotel para pernoctar tras una jornada de relax.
Centro de la villa
Se localiza en la comarca de Bergantiños, en el casco urbano de Carballo, municipio próximo a la ciudad de A Coruña, a poco de Santiago y a escasos kilómetros del estupendo arenal de Razo, del entorno natural del Refugio de Verdes o de los maravillosos pueblos que conforman la conocida Costa da Morte.
Actualmente, como en tiempos de los romanos y árabes, sigue siendo el destino de una infinitud de visitantes, llegados de todas las partes del país, con el único fin de beneficiarse de las excelentes virtudes terapéuticas de sus aguas. Aguas que son mineromedicinales, sulfurado-sódicas y emergen a una temperatura de 42ºC, indicadas para patologías como reumatismos, afecciones de las vías respiratorias y de la piel, sistema circulatorio y nervioso, vías urinarias, procesos ginecológicos, afecciones hepáticas, trastornos metabólicos, odontológicos, tratamientos de reposo y antiestrés. Desde el año 1928 estas aguas están declaradas de utilidad pública.
Mientras que las técnicas que se emplean son baños de agua durmiente, de burbujas e hidromasaje, chorros a presión y subacuáticos, cura hidropínica (agua bebida), duchas circulares, piscina termal, inhalaciones, vaporizaciones, parafangos y masajes.
Hotel
El edificio que alberga el hotel (60 habitaciones) y el balneario (ubicado en el bajo) fue levantado sobre una antigua casa de baños. Cuenta con unas modernas instalaciones y una tecnología muy avanzada que le permite desarrollar un amplio conjunto de terapias termales, bajo la supervisión del equipo médico y el control de un equipo auxiliar de profesionales especializado en técnicas de balneoterapia.
Finalmente, el hotel balneario ofrece distintas ofertas y tratamientos personalizados, así como varios programas termales, incluidos los del IMSERSO. El hotel cuenta además con un restaurante de cocina tradicional gallega en el que se sirven también desayunos.