La basílica de la ascensión es una iglesia que se encuentra situada en Allariz, concretamente en el lugar de Aguas Santas. Es una construcción inacabada que data del siglo XIII y que fue levantada sobre una cripta de origen más antiguo.
En estado ruinoso
Cuando hablamos de la basílica de la Ascensión nos referimos realmente a las ruinas de la basílica de la Ascensión, pues esta instalación se encuentra en la Lista Roja de Patrimonio por su actual esta de conservación en el que la vegetación se ha apoderado del lugar.
Hay pocas referencias acerca de la historia detrás de la construcción de esta basílica, si bien algunos estudios apuntan a los templarios como los responsables de poner en marcha su construcción con la excusa de preservar lo que realmente se esconde bajo su suelo. Lo cierto es que este proyecto nunca llegó a término y hoy esas ruinas lo son de algo que nunca llegó a alcanzar el aspecto que querían que tuviese. No en vano, muy cerca de la propia basílica encontramos ya otro templo, el Santuario de Augas Santas.
¿Cómo es la basílica?
La Basílica de la Ascensión tiene forma una planta en forma de cruz y en el medio de la misma se esconden las escaleras que dan acceso al nivel subterráneo, el verdadero valor de toda la estructura. No hay tampoco una idea clara de lo que es este subnivel, pero teorías apuntan a una sauna castreña o un horno diseñado por la cultura prerromana que compartieron vida en el cercano Castro de Armea.
En la cripta podemos diferenciar varias estancias diferentes. Podemos ver algunos sarcófagos medievales y lo que parece un altar que se sitúa frente a la única ventana que da luz natural al interior del recinto subterráneo. Hay otras dos salas más además de esta antesala con el altar. Estas dos salas son de épocas diferentes; una se data en el siglo XII y la otra es bastante más antigua y se habla del siglo VI o VII. El último elemento y más antiguo es la estancia prerromana que describen como el horno asociado a la cultura castreña.
No existen tampoco referencias claras que expliquen cuál era el uso que los antiguos castreños le daban a estos hornos. Entre las diferentes hipótesis que existen se habla de saunas primitivas, también de verdaderos hornos o zonas de incineración de cuerpos humanos dentro de un contexto religioso de la propia cultura celta predominante en el Castro. La ideal de religiosidad es la más extendida, incluso se piensa que el lugar puede estar relacionado con algún rito religioso que explique la presencia de ciertas decoraciones en las piedras de la cripta, conocidas como Pedras Formosas. Esta teoría última refuerza la idea de cristianizar la cripta tratando de levantar una basílica encima.