En la Ciudad Vieja de A Coruña se puede ver la Casa Cornide, una joya arquitectónica del siglo XVIII que captura la esencia del último período del barroco gallego. Declarada Bien de Interés Cultural (BIC) en 2023, la Casa Cornide se erige no solo como un monumento arquitectónico, sino también como un símbolo de la lucha por la memoria histórica.
Diferentes usos y propiedades
Este edificio, cargado de historia y simbolismo, fue diseñado por el ingeniero militar Francisco Llobet entre 1750 y 1760. Su imponente fachada, construida en granito rosa, destaca por su elegancia y por el escudo de los Cornide que corona la entrada principal.
Con una superficie de 1.430 m², el inmueble cuenta con una planta baja, dos alturas y una distribución que incluye once habitaciones, trece baños, una impresionante biblioteca y un salón principal en la planta superior.
Este espacio ha sido testigo de múltiples transformaciones a lo largo de los siglos. Desde su función como residencia de la influyente familia Cornide hasta albergar, en el siglo XIX, el ayuntamiento de la ciudad, la Casa Cornide siempre ha sido un lugar destacado en la vida coruñesa.
En el siglo XX, el edificio vivió etapas de uso cultural, como sede del Centro Cultural de Santo Tomás de Aquino y su conocida sala de cine. Sin embargo, su historia tomó un giro polémico en 1962, cuando, tras un cuestionado proceso de venta, pasó a manos de Carmen Polo, esposa del dictador Francisco Franco. Este episodio despertó controversias que aún resuenan. En los últimos años, el Ayuntamiento de A Coruña ha trabajado intensamente para devolver este patrimonio al ámbito público.