El Castro de Castelo Pequeño de Santigoso se encuentra ubicado en el alto del Castelo, uno espacio de interesante visita para poder disfrutar de unas grandes vistas sobre el concello de A Mezquita. Este fue el lugar escogido en la fase final de la Edad del Hierro para el asentamiento de una población castrexa.
Sierra de Azoreira
Los estudios realizados en el castro hablan de una datación en torno a los siglos II a.C. a I d.C. En esta época la vida en el gran castro de Castelo Pequeño de Santigoso se encontraba en su máximo apogeo, en medio de la Sierra de Azoreira.
El Castro lo formaban tres recintos a más de 1200 metros del nivel del mar que contaban ya de por sí con unas grandes defensas naturales por la mayoría de sus costados y un gran dominio visual del entorno. La región norte era quizás la más desprotegida, motivo por el cual el poblado levantó en este acceso un campo de piedras hincadas que es una de las pocas referencias visuales que los ojos menos expertos podrán distinguir en la zona.
Cada uno de los tres recintos que formaban el castro contaba con sus propias murallas de granito y estaba aplanado sobre fuertes terraplenes. El recinto superior o croa llega a levantarse hasta diez metros pese al paso del tiempo desde que el castro quedó abandonado.
Por los estudios llevados a cabo en el lugar se ha podido estimar que este castro superaba las 9.5 hectáreas, siendo uno de los referentes en tamaño de toda Galicia por detrás del de Santa Trega y junto al de San Cibrán de Lás.