La Cascada do Pozo do Inferno es una caída natural del agua del río Ribadil en su descenso hasta encontrarse con las aguas del río Miño del que es afluente. Esta cascada se encuentra en el ayuntamiento de Crecente, en un espacio natural protegido por la Red Natura 2000.
Acondicionado en 2018
Hoy la Cascada do Pozo do Inferno es uno de los atractivos turísticos de Crecente, más desde un año 2018 en el que la zona se ha acondicionado y mejorado con pasarelas de madera y un mirador que permite disfrutar de la vista de la propia cascada y sus charcas. Todo ello formando parte del conjunto Sendero de Vilar que recorre la zona siguiendo el curso del Ribadil.
Además de la propia cascada y las aguas del río, desde este sendero se puede observar también los restos de lo que fue la antigua central hidráulica que aprovechaba las fuerzas de las aguas para generar energía. También vemos los restos de antiguas contracciones que aprovechaban estas fuerzas, como los del antiguo molino de harina.
Del 2019 es el puente peatonal también próximo al mirador y que nos deja cruzar el río en Mandelos ofreciéndonos una pasarela sobre el río desde la que sacar imágenes estupendas. Cerca encontramos también un puente de piedra y los restos de una antigua aldea abandonada.