Construcciones tradicionalesSi eres un apasionado de la historia, la naturaleza y el patrimonio industrial, entonces la Herrería de Penacova debe estar en tu lista de lugares a visitar. Este fascinante conjunto de edificaciones nos transporta en el tiempo, revelando los secretos del trabajo del hierro en la Ribeira Sacra, desde el siglo XVIII hasta mediados del siglo XX. Situada en el municipio de Bóveda, en la provincia de Lugo, la Herrería de Penacova forma parte de la enriquecedora Ruta del Románico de la zona.
Un viaje al pasado
La Herrería de Penacova se compone de tres elementos principales que nos sumergen en el pasado industrial de la región: la propia herrería, la fragua y el molino. Cada uno de estos lugares cuenta una historia única:
-La herrería: Este edificio histórico, erigido en 1780, fue un centro neurálgico de la producción de hierro durante décadas. Utilizando la fuerza del agua del regato de Penacova, se fundía el hierro y se obtenían lingotes. Este proceso industrial continuó hasta 1875.
-La fragua: Tras la clausura de la herrería, en 1880, una sociedad de herreros adquirió las ruinas y construyó una fragua. Aquí, el hierro se martilleaba y se transformaba en herramientas esenciales como aperos de labranza, clavos y utensilios domésticos. La fragua estuvo en pleno funcionamiento hasta mediados del siglo XX, cuando la llegada de la electricidad llevó a los herreros a instalar sus propias herramientas eléctricas en sus talleres.
-El molino: Aprovechando la robustez de la estructura de la antigua herrería y la piedra que la conformaba, se construyó un molino. Su función era moler el grano y, a cambio, se cobraba una maquía, un impuesto en especie que se entregaba por cada ferrado (una medida antigua) de grano que se procesaba.
Para visitar la Herrería de Penacova, es necesario concertar una cita con los propietarios, quienes son descendientes directos del último herrero que trabajó en la fragua. Además, tienes la oportunidad de alojarte en la casa de labranza que funciona como alojamiento rural. Sin duda, una experiencia inolvidable para aquellos que aprecian la combinación perfecta de turismo cultural y natural.
