En el poblado de A Eirexe, en Castroverde (Lugo), se puede visitar la Iglesia de Santa María de Uriz, un claro ejemplo de arquitectura románica tardía. Rodeada por un paisaje de colinas suaves cubiertas de robledales y ríos caudalosos como el Tórdea y el Uriz, este lugar merece la visita si te encuentras por la zona.
La sencillez del románico rural del siglo XIII
Visitar Santa María de Uriz no es solo una experiencia arquitectónica, sino también un viaje al pasado, donde cada piedra y cada detalle decorativo cuentan historias de fe, arte y tradiciones locales. La iglesia se puede datar en el siglo XIII y sigue la línea de otros templos cercanos del municipio.
La iglesia, construida en granito, combina robustez y sencillez. Su planta, de una sola nave y ábside semicircular, respeta la esencia del románico rural. En su exterior, los muros muestran un trabajo minucioso: sillares regulares en las zonas nobles, como las esquinas o las puertas, y otros más rústicos en el resto de la estructura. La fachada, coronada por una espadaña sencilla, remata un conjunto armonioso y acogedor.
Dentro, destacan detalles como la pila bautismal, dividida en dos partes de épocas diferentes. Su copa, más antigua, nos habla de una iglesia previa al templo actual, mientras que el pie, añadido después, refleja la evolución de los rituales bautismales. El presbiterio, con arcos de medio punto y una luz que entra delicadamente por las saeteras, aporta un aire de solemnidad.