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La Torre de Hércules es el faro más antiguo del mundo y fue declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Se conoce que la función principal de esta construcción romana era utilizarla como un faro de navegación pero posteriormente pasó a ser una fortificación de defensa.
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Cabo Ortegal es el segundo punto más septentrional de la península ibérica. Se trata de un punto de importante valor desde el punto de vista morfológico, ornitológico y geológico que se encuentra situado en la localidad coruñesa de Cariño, en plena ría de Ortigueria. La vista de las islas que se observan desde el cabo y el faro del lugar son algunos de sus principales atractivos.
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El cabo de Fisterra es un lugar milenario de frecuentes visitas, destino de muchas rutas. Este lugar ya fue conocido por los romanos, ellos dieron nombre a este lugar: "Finis Terrae", pues las vistas desde este punto eran al infinito, no se veía más tierra, solo mar y nubes al final del camino alcanzado por la vista. El Faro de Fisterra es el que se encuentra en la zona más al oeste de todo el continente europeo y sirve para guiar a los barcos en una zona muy rocosa y peligrosa en su proximidad. Este punto es también escogido por muchos peregrinos para finalizar el Camino de Santiago.
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El Faro de Cabo Vilán está situado en plena Costa da Morte, a 5 Km. Del centro de Camariñas, es de gran importancia en este punto de la costa dada la peligrosidad de la navegación en esta zona. Fue el primer faro eléctrico de toda España y su construcción se hizo más que necesaria por los numerosos y trágicos naufragios que hubo en la zona. Uno de ellos, el del buque inglés Serpent, produjo 172 víctimas mortales.
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Situada en el municipio de Ribadeo, la Isla Pancha es un pequeño islote de poco más de una hectárea de superficie y que está unida a la costar por medio de un puente. Un faro que data de mediados del siglo XIX es lo más destacado de esta verde isla rodeada por el mar cantábrico. Verde y escarpada, por esta isla pasan rutas de senderismo concurridas de la zona.
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El faro de Punta Frouxeira (Valdoviño) es de diseño vanguardista en blancos y azules, Comenzó a funcionar en 1994 y que fue remodelado en 2008. Genera señales luminosas visibles a 20 millas. Está construido en lo alto del acantilado y la torre tiene una altura de más de 45 metros.
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El Faro de Cabo Home es una construcción de señalización marítima de 18 metros pintada de blanco que se levantó en este cabo a mediados del siglo XIX. Forma parte de una ruta de tres faros que es uno de los grandes atractivos e Cangas do Morrazo en un paseo en formato circular que recorre la Costa de la Vela y permite ver de cerca hasta tres de los faros que marcan la entrada en la ría de Vigo.
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El último faro construido en Galicia es el Faro de Nariga, en Malpica, Destaca por ser el faro más joven y el más llamativo debido a la rareza de su edificación. Mide 50 metros de altura y fue diseñado por al arquitecto gallego César Portela en el año 1995. En su estructura inferior, con forma de proa de barco, llamaba la atención una escultura de bronce diseñada por Manolo Coia y que se conocía como el Atlante, aunque fue robada en 2022 y se va restaurar.
Galicia, una tierra de misterios envuelta por el mar, esconde entre sus joyas naturales unos guardianes que atraen interés y turismo a pesar de que su finalidad es bien distinta. Estamos hablando de sus faros. Estos no solo cumplen una función vital para la navegación, sino que también son testigos de historias, leyendas y de la belleza inigualable del paisaje gallego.
Nos embarcamos en un viaje para descubrir los 8 faros con más encanto de Galicia, faros que son un reclamo tanto para amantes de la naturaleza como para aquellos buscando inspiración o simplemente un momento de paz frente al mar. Estos ocho faros no son solo puntos de luz en la inmensidad del mar; son historias, son vida, son parte del alma de Galicia. Invitan a ser descubiertos, a sentir el viento salado en la piel y a contemplar la inmensidad del océano, recordándonos la pequeñez del ser humano frente a la magnitud de la naturaleza. Galicia, con sus faros, es sin duda un destino imprescindible para aquellos que buscan belleza, historia y conexión con el mar.
Los 6 faros que visitar en la provincia de A Coruña
La escarpada costa de la provincia coruñesa lidera en número este ranking de faros más interesantes de Galicia ya que cuenta con cantidad de estructuras diferentes que merece la pena conocer y visitar.
Comenzamos nuestro recorrido por el Faro de Cabo Ortegal (1984), ubicado en el punto donde se encuentran el Atlántico y el Cantábrico, es famoso por sus impresionantes acantilados, algunos de los más altos de Europa. El entorno del faro, con su flora y fauna únicas, lo convierte en un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y aquellos que buscan escapar de la rutina diaria.
Siguiendo de ruta la siguiente parada es la del faro de Punta Frouxeira, en Valdoviño. Este moderno faro, además de guiar a los marineros, es un punto de observación privilegiado para la avifauna, especialmente durante las migraciones. Sus playas adyacentes, con kilómetros de arena blanca, son un paraíso para surfistas y familias por igual. Esta obra vanguardista data del año 1992.
El siguiente faro en la lista es también el más simbólico. Hablamos de la Torre de Hércules, seguramente el faro más famoso de Galicia. No podemos hablar de faros sin mencionar a este símbolo de la ciudad de A Coruña. No en vano estamos hablando del faro en funcionamiento más antiguo del mundo (Siglos I-II d.C.). Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este faro romano es todo un símbolo de la ciudad y un testimonio viviente de la ingeniería antigua. Sus mitos y leyendas, como la de Gerión y Hércules, añaden un aura mágica a la visita.
El cuarto de los faros que vamos a citar en esta ruta descendente de norte a sur de la costa coruñesa, es el Faro de Punta Nariga, en Malpica de Bergantiños. Destaca por su arquitectura moderna, obra del arquitecto César Portela en 1995. Este faro, que parece emerger de las rocas como una escultura, ofrece una vista impresionante de la bravura del Atlántico. Rodeado de paisajes agrestes, es un testimonio de la continua innovación y el respeto por la naturaleza que caracteriza a Galicia.
Más al sur de nuestras primeras referencias podemos conocer el Faro Vilán (1933), situado en Camariñas. Esta estructura e alza imponente sobre un promontorio rocoso, ofreciendo una de las panorámicas más espectaculares de la Costa da Morte. Fue el primer faro eléctrico de España, y su historia está íntimamente ligada a los naufragios en esta costa. Hoy, su entorno es un espacio protegido, hogar de numerosas especies de aves y flora endémica. Destaca por ser el faro eléctrico más antiguo de España.
Si seguimos nuestro recorrido hacia el sur de la provincia no podemos dejar sin conocer el faro del fin del mundo. El Faro de Finisterre (1853), situado en el cabo del mismo nombre, es conocido como el "fin del mundo" para los romanos. Este lugar mágico, donde el camino de Santiago llega a su fin, ofrece vistas impresionantes del océano y es un punto de encuentro para peregrinos, turistas y locales que buscan contemplar uno de los atardeceres más hermosos de Galicia.
El faro más bonito de la provincia de Pontevedra
El único faro de nuestra lista presente en la provincia de Pontevedra es, el Faro Cabo Home, se sitúa en la Costa da Vela, en el municipio de Cangas do Morrazo. Este faro construido también en 1853 es una de las torres balizas de mayor altura de la costa gallega gracias a sus 18 metros. Está rodeado de playas salvajes y acantilados impresionantes, ofrece unas vistas panorámicas del océano Atlántico y las Islas Cíes. Su entorno natural, prácticamente virgen, lo convierte en un lugar perfecto para los amantes del senderismo y aquellos que buscan desconectar del bullicio.
Isla Pancha
Para acabar con este recorrido de los faros más bonitos de Galicia tenemos que regresar de nuevo al norte de la comunidad gallega. En la costa de Ribadeo, el Faro Isla Pancha (1857) emerge en una pequeña isla unida al continente por un puente. Este pintoresco faro, rodeado por el mar Cantábrico, ofrece un espectáculo sin igual durante las tormentas y al atardecer. Su singular ubicación lo convierte en un destino único para los fotógrafos y aquellos en busca de un momento de tranquilidad. Cabe destacar que hoy está acondicionado como un lujoso y singular alojamiento turístico, un proceso que se inició en 2014.