Conventos y MonasteriosEn la localidad de Lourenzá se encuentra situado en Monasterio de San Salvador de Villanueva, un edificio que actualmente acoger la casa consistorial y que está declarado como monumento histórico-artístico desde 1974.
La historia del monasterio
Para encontrar el origen del monasterio de San Salvador debemos irnos más de mil años atrás, al siglo X, cuando Osorio Gutiérrez, conocido como el Conde Santos, se encargó de su fundación. A su muerte fue enterrado en el mismo edificio y su cuerpo fue introducido en un sarcófago de mármol del siglo VI y traído desde Aquitania. Hoy se encuentra en la Capilla de Nuestra Señora de Valdeflores.
Poco se conserva actualmente del original edificio del siglo X más allá de un arca (IX) y una lauda (XII). El actual edificio tal y como lo conocemos hoy es un resultado de los cambios y ampliaciones que fue sufriendo, predominando hoy en día el estilo barroco de su última transformación importante en el siglo XVII. Esta modificación se realizó ya con el cenobio bajo influencia de la orden benedictina.
La decadencia de cenobio se inicia tras las desamortizaciones de Mendizábal, ya en el siglo XIX y no se recupera la vida monacal en el edificio hasta 1910. Los monjes residen de nuevo en el edificio hasta mediado de siglo, momento en el cual el ayuntamiento de Lourenzá se encarga del edificio y decide instalar allí la casa consistorial. El edificio también alberga una interesante colección de arte sacro que ocupa el espacio que en otra época era la biblioteca del monasterio.
Visitas
El Monasterio de San Salvador de Villanueva de Lourenzá puede visitarse con guía de forma gratuita los lunes a las 12 y a las 17 horas y de martes a sábado a las 12 de la mañana por un precio de tres euros.
La visita permitirá descubrir todos los rincones de este edificio que fue creciendo con los años desde el humilde cenobio familiar del año 947. El claustro mayor data del siglo XVII y es una obra de Juan de Villanueva y un siglo después se levanta la iglesia de Santa María, un edificio en el que figura como uno de sus autores en afamado Fernando de Casas y Novoa, conocido por ser autor de la fachada del Obradoiro de la catedral de Santiago. En cuanto al retablo mayor, es una obra de Ventura Rodríguez y tiene estilo neoclásico.
Lourenzá es uno de los lugares de paso del Camino de Santiago y este monasterio es una parada obliga para muchos peregrinos. Uno de los motivos es la visita al conocido como Pozo del Santo, situado en el claustro menor del monasterio. De este pozo se dice que sus aguas tienen propiedades curativas para aquellos que beban sus aguas.
