En el municipio de Meis y bien situado entre las rías de Arousa y Pontevedra se encuentra el Monasterio de la Armenteira, una de las joyas de la zona en lo que se refiere a arquitectura religiosa. Todavía hoy se encuentra habitado por monjas de la orden Cisterniense.
Los Lunes de Pascua se celebra la romería de la Virgen de las Cabezas en el monasterio y son muchos los que se acercan hasta aquí, a pie, siguiendo el camino de los antiguos peregrinos, para honrar a la Virxe das Cabezas.
El Monasterio cuenta además con una pequeña hospedería y tienda en la que se venden productos artesanales y naturales como aceites esenciales o jabones fabricados en el propio templo por las monjas
Breve historia del Monasterio
El monasterio de Armenteira fue fundado por el abad Ero en el siglo XII tras una donación de Diego Obéquiz. La leyenda cuenta que Ero, por entonces caballero de la corte de Alfonso VII, edificó la iglesia por petición de la propia Virgen en sus sueños. El caballero accedió a la petición de la Santa como petición a la Virgen por los problemas de infertilidad de su matrimonio.
El monasterio pasa a pertenecer a la Orden Cisterciense en el año 1162 denominándose Santa María de Armenteira y poco después se iniciarían las principales obras del monasterio, entre ellas la de la iglesia en el año 1167.
El edificio guarda un estilo renacentista y Barroco propio de los siglos XVI y XVII en los que fue reformado. De la época románica anterior solo se conserva la iglesia.
La historia del monasterio está tiene su punto más trágico en 1837, fecha en el que la construcción es abandonada fruto de las desamortizaciones de la iglesia que tuvieron lugar en la época. No es hasta finales del siglo XX cuando el monasterio de Armenteira vuelve a recuperar su esplendor tras una profunda restauración y el regreso de una pequeña comunidad de monjas cistercienses para habitarlo.
¿Cómo es el templo?
La iglesia es de planta de cruz latina, en la fachada destaca un rosetón que adorna la portada formada por varias arquivoltas las cuales se mantienen gracias a las seis columnas embebidas de cada lado. Los contrafuertes separan las tres naves por el exterior, y terminan con ábsides semicirculares que se encuentran en la cabecera. Unos arcos fajones refuerzan la nave apuntada central.
La fachada principal del monasterio forma un ángulo recto, según las formas tradicionales, con la de la iglesia, tiene una sencilla portada centrada bajo cinco balcones situados en la iglesia, y tiene una puerta adintelada coronada por un arco en el que se puede ver el escudo del monasterio. Sobre el crucero se sitúa el cimborrio, que está cubierto con una cúpula con nervaduras que se cruzan en el centro que es propio del arte Almohade y único caso que podemos encontrar en Galicia, donde se demuestra la participación de maestros musulmanes.
El elemento principal del monasterio de Santa María de Armenteira es el claustro Regular o de las Procesiones, que se empieza a construir a finales del siglo XVI y se finaliza a finales del siglo XVIII en estilo neoclásico. El claustro es de planta cuadrada, se encuentra pegado al lado sur de la iglesia y comunicado con ella a través de una portada situada a la altura del cuarto tramo de la nave principal. El claustro fue sometido a una gran restauración en el año 1969.