Nigrán es un municipio de la provincia de Pontevedra, perteneciente a la comarca del Val Miñor. Situado muy próximo a la ciudad de Vigo, es un pueblo con grandes alternativas en lo que a cultura y ocio se refiere. Destaca, sobre todo, su Patrimonio histórico, donde construcciones como el Arco visigótico, el Templo Votivo del mar, la Torre de Méndez y el Monumento a la Marina Universal, hacen las delicias de los visitantes que se acercan a conocer esta hermosa localidad.
Homenaje a todo oficio marino
El Monumento a la Marina Universal, situado en Monteferro, es obra del arquitecto Manuel Gómez Román y fue inaugurado en 1924. Simboliza el homenaje a las cuatro marinas (guerra, pesca, mercante y deportiva) que son figuradas por cuatro coronas de bronce y una imagen de la Virgen del Carmen, patrona de todas ellas, con el niño Jesús en sus brazos. La estatua mide cuatro metros y pesa 16 toneladas. El dictador Miguel Primo de Rivera puso la primera piedra de este monumento, que fue una propuesta de un cónsul británico casi diez años atrás.
El monumento, un monolito de granito de unos 25 metros de alto, lleva el diseño del vigués Manuel Gómez Roñan, pero fue el escultor malagueño Enrique Martín Higuero el que se encargó de esculpir la estatua de la Virgen. Se emplearon 7.000 toneladas de piedras para levantar el Monumento, que tiene forma de torre piramidal y unas letras encima de las columnas de su base en las que se lee la leyenda “Salve Regina Marium”.
En lado norte del monumento, se puede leer una placa de mármol a modo de lápida con la siguiente leyenda: “Una oración por los navegantes que en la lucha por la existencia hallaron en el mar su sepultura, por los que han perecido luchando por el honor de su Patria o por el ideal. Por tantas tragedias, en fin, sepultadas en el fondo del Atlántico.”
Otra lápida de mármol, esta en su cara este, amplia los datos de la inauguración. “Se inauguró este monumento el 28 de julio de 1924, reinando S.M. Don Alfonso XIII, por el Presidente del Directorio, Excmo. Sr. Don Miguel Primo de Rivera, con asistencia del general Excmo. Sr. Don Severiano Martínez Anido, principal protector, y la cooperación de los generales Excmos. Srs. Don Luis Bermúdez de Castro, Ministro de la Guerra, y Don Ángel R. del Barrio, Gobernador Militar de Vigo. Lo bendijo el Ilmo. Sr. Don Manuel Mª. Vidal Boullón, Obispo de Tuy.”
Mientras que la que se lee en la zona sur habla sobre los motivos de levantar semejante obra: “Se elevó este Monumento a la Marina Universal para que los navegantes, al divisarla sientan la emoción de verse saludados por España. Que de este granito emanen perpetuamente efluvios de amor que conforte a los solitarios viajeros de la espléndida llanura del Atlántico.”
La obra fue sometida a un trabajo de reacondicionamiento en el año 2005, cuando se decidió mejorar el entorno para ampliar el espacio para el aparcamiento y añadir a los pies de la estatua un espacio para el esparcimiento y recreo en familia. Peso a las obras realizadas, la figura no se encuentra en el mejor estado de mantenimiento, lo que provoca que el monumento no ofrezca su mejor imagen.
Vistas privilegiadas y mucho que visitar cerca
Desde la ubicación de este bello monumento, se puede disfrutar de unas hermosas vistas, miradas que nos trasladan a las Islas Estelas, a las Cíes y a la Ensenada de Baiona. Precisamente la localización de la estatua en un lugar relevante desde el punto de vista ecológico y natural ha sido objeto de polémica desde hace años.
Al mismo tiempo que visitamos el monolito, podemos aprovechar para dar un paseo por las rutas que recorren la península de Monteferro, así como también acercarnos el yacimiento romano y, como última recomendación, es interesante la subida a la cara norte del Faro, a través de las distintas sendas de escalada habilitadas para ello.