En plena ría de O Burgo, en Culleredo, se encuentra uno de los tesoros históricos y culturales más fascinantes de Galicia: el Museo y Molinos de Acea da Ama. El entorno, rodeado de naturaleza y atravesado por rutas de senderismo, invita a descubrir la historia en un marco tranquilo y natural, ideal para una visita con amigos o familia.
Los molinos de su categoría más antiguos de Galicia
Este espacio combina la belleza de un entorno natural con el legado de los molinos de marea, cuya historia se remonta al siglo XII. Construidos por orden del monasterio de Sobrado, esta obra de ingeniería hidráulica aprovechó el flujo y reflujo de las mareas para funcionar durante más de 800 años, destacando como los más antiguos de Galicia en su categoría.
Los molinos de Acea da Ama fueron clave en la economía medieval de la región, especialmente durante el auge del Burgo de Faro, cuando llegó a rivalizar en importancia con la ciudad de A Coruña. Su diseño permitía un funcionamiento continuo a lo largo del año, lo que los convertía en una alternativa fiable frente a los molinos de viento o fluviales. Aunque en el siglo XIX la fuerza del agua fue reemplazada por el vapor, el edificio mantuvo su relevancia, albergando incluso una fábrica de harina en el siglo XX.
Actualmente, este conjunto de molinos es propiedad municipal y alberga un museo que nos transporta al pasado, explicando el ingenio detrás de su funcionamiento y la importancia de estos sistemas en la vida cotidiana de las comunidades rurales. Además, el recinto cuenta con una sala de exposiciones dedicada al escultor local Xosé Rey Lago, enriqueciendo aún más su oferta cultural.