SantuariosEn las colinas cercanas a Celanova, se encuentra el conocido como Santuario da Virxe do Cristal, un lugar venerado con una historia intrigante que ha cautivado a generaciones.
La leyenda de la bola de cristal
La historia de este templo se remonta a 1650, cuando un pastor local encontró una pequeña imagen de la Virgen dentro de una misteriosa bola de cristal. Este descubrimiento asombroso, donde el vidrio transparente no mostraba señales de soldadura y permitía admirar la imagen desde cualquier ángulo, se convirtió en el epicentro de una devoción que creció con el tiempo.
A pesar de su origen divino, la imagen pasó por un episodio peculiar en el que el pastor, enfrentándose a un aumento inexplicable de su peso, decidió desecharla. Sin embargo, al día siguiente, una joven la encontró de nuevo, marcando el inicio de una historia de devoción que llegó a oídos del mismo Felipe IV, quien solicitó examinar la imagen en la Corte. Aunque la devoción creció, el enigma que rodea la creación de la pequeña esfera de cristal que la envuelve, con apenas 5 cm de diámetro, sigue sin resolverse hasta el día de hoy.
En 2015, la historia del santuario tomó un giro oscuro cuando la casa del párroco que custodiaba la imagen fue asaltada violentamente, resultando en la muerte del religioso. La imagen desapareció, y a pesar de los esfuerzos, nunca se volvió a saber de ella. En 2020, el caso fue archivado debido a la falta de sospechosos, dejando un vacío en la historia del Santuario da Virxe do Cristal.
¿Cómo es el templo?
La construcción del templo-santuario se convirtió en una necesidad a medida que la devoción crecía. El edificio barroco de una sola planta, con su sobria pero majestuosa fachada, alberga la imagen pétrea de la Virgen sobre un frontón partido. El campanario, rematado con una cruz de hierro, añade un toque celestial al paisaje. En el interior, un retablo barroco resguarda la enigmática bola de cristal que ha fascinado a generaciones.
El Santuario da Virxe do Cristal, además de ser un lugar de adoración, ofrece servicios para los visitantes. Con una capilla para misas al aire libre, una pequeña capilla a modo de peto, mesas, fuente y barbacoas, el santuario se presenta como un espacio acogedor para los peregrinos y curiosos.
La festividad anual, que tiene lugar el 15 de septiembre, culmina con una procesión que asciende hasta la plaza del pueblo de Vilanova de los Infantes. Aquí, la imagen de la Virxe do Cristal se encuentra con otra procesión que lleva a San Roque y San Sebastián, marcando un momento de conexión espiritual y comunitaria. La celebración continúa con bailes típicos y una gran romería, fusionando la fe con la tradición local en un evento que perdura a lo largo de los años.
El Santuario da Virxe do Cristal, más allá de su enigma no resuelto, sigue siendo un faro de devoción y un testimonio tangible de la intersección entre la fe y la historia perdida en las tierras de Celanova.
