La Torre de la Pena, más que un monumento, es un símbolo palpable de un pasado enraizado en la historia de Xinzo Limia. Su presencia imponente invita a reflexionar sobre la época medieval y el papel crucial que jugó en la protección de esta tierra fronteriza desde el siglo XII que fue levantada.
La Torre de la Pena, más que un monumento, es un símbolo palpable de un pasado enraizado en la historia de Xinzo Limia. Su presencia imponente invita a reflexionar sobre la época medieval y el papel crucial que jugó en la protección de esta tierra fronteriza desde el siglo XII que fue levantada.