La iglesia de Guilamil, en Rairiz de Veiga, revela una historia fascinante. Aunque experimentó modificaciones modernas, los restos medievales en sus muros laterales destacan su personalidad arquitectónica única. La fachada muestra portadas medievales y la influencia de la arquitectura portuguesa del siglo XIII.
La iglesia de Guilamil, en Rairiz de Veiga, revela una historia fascinante. Aunque experimentó modificaciones modernas, los restos medievales en sus muros laterales destacan su personalidad arquitectónica única. La fachada muestra portadas medievales y la influencia de la arquitectura portuguesa del siglo XIII.