Consejos para ahorrar en la factura de la luz
Publicación: 04 de October de 2021, 13:22 Actualizada: 28 de April de 2022, 10:14
El precio de la luz está viviendo en nuestros tiempos unos máximos históricos que hacen que cada vez más gente se preocupe por una mayor eficiencia energética y busque consejos o trucos para rebajar las facturas de la luz que llegan a final de mes o con periodicidad bimensual. Cualquier truco, cambio de electrodoméstico o nueva costumbre puede suponer un ahorro pequeño al día que, con la acumulación de días al año suponga un ahorro considerable.
Con nuestra entrada del blog de hoy vamos a pararnos a describir algunos consejos para lograr ser más eficiente en el consumo energético y así trabajar por la reducción de consumo de luz.
Reduce la potencia contratada
No hay por qué pagar por una potencia excesiva en casa que realmente no te hace falta porque no llegas a consumirla. Si vives tú solo o en pareja y en un piso de reducidas dimensiones, lo normal es que no necesitas tener contratada la potencia máxima, porque difícilmente estarás consumiendo al mismo tiempo tanta electricidad.
Si no sabes qué tienes contratado, puedes encontrarlo en tu contrato de la luz, en tu perfil de internet con la energética o en las facturas. De otro modo, una llamada a tu comercializadora eléctrica para hacer la consulta también te podrá resolver la duda y agilizarte el trámite de reducción de potencia. Elige una potencia que se adecúe a tu consumo y ahorra con ello en la factura de la luz. Como dato relevante y orientativo, la potencia media contratada en España ronda actualmente los 4,4 kW.
Es también interesante revisar con frecuencia tus facturas y recurrir cuando sea conveniente a los comparadores de precios para ver si la compañía energética con la que estás trabajando es la que mejores precios te puede ofrecer de todas las que hay en el mercado.
Haz un consumo eficiente
El consumo eficiente se consigue mediante el uso de aparatos eléctricos eficientes. No es necesario que jubilemos de golpe todos nuestros electrodomésticos antiguos, pero sí es bueno tener claro cuáles son los más viejos y que más consumen para ir poco a poco sustituyéndolos por unos más modernos que consuman menos. En la descripción de cada producto al comprarlo puedes ver sus características para saber si son o no aparatos de bajos consumo. En cuanto consigas ir cambiando uno a uno todos los electrodomésticos de vivienda te darás cuenta de la gran diferencia de consumo que existe entre antes y después.
En cualquier tienda de electrodomésticos cuentan ya con unas gamas muy amplias de aparatos de bajo consumo y eficientes a buenos precios, tanto de marcas lideres como de otras más económicas. Fíjate en las etiquetas y busca los electrodomésticos con categoría A, A+ y superiores. Esto se debe tener especialmente en cuenta con los electrodomésticos de gran tamaño y frecuente uso como las lavadoras, las neveras o los congeladores. Opta también por electrodomésticos que tenga un programa Eco.
Consumo eficiente es también un uso inteligente de los electrodomésticos. Poner la lavadora o el lavavajillas solo cuando estén llenos, reducir la temperatura de los lavados, regular la temperatura de la nevera, cocinar en el hornillo adecuado y con tapa... todos estos son trucos que suponen un pequeño porcentaje de ahorro en cada acción.
Apaga lo que no uses
En cantidad de ocasiones no nos damos cuenta de que un aparato o dispositivo electrónico no está apagado. Que apaguemos el televisor con el mando no quiere decir que esta no esté consumiendo. Una televisión en stand by no está encendida, pero sí está consumiendo porque no está apagada por completo. Si no vas a usar un dispositivo por un largo periodo de tiempo lo mejor es que directamente lo apagues o lo desenchufes para no desperdiciar electricidad manteniéndolo en stand by sin motivo. Abandonar la costumbre del stand by te puede suponer un ahorro de hasta un 10% al año.
Evidentemente, del mismo modo que hablamos del vigilar los dispositivos en stand by, haz lo mismo con las luces. Acuérdate de apagar las luces y no dejes una encendida sin sentido si te vas a ir de la habitación por unos minutos. Lo mismo ocurre con el aire acondicionado o la calefacción. Un buen consejo es también apagar las regletas o incluso bajar los plomos de la casa si nos vamos a ir por un largo periodo de tiempo a pasar unos días fuera por vacaciones o por trabajo.
Invierte en tecnología LED
Una inversión importante ahora puede significar un ahorro en el futuro. Cambiar las bombillas clásicas de toda la casa para apostar por bombillas LED de bajo consumo es algo que te reportará muchos beneficios.
Las bombillas LED tienen una larga vida útil, iluminan igual o mejor que las tradicionales y consumen muchísimo menos. Estas bombillas ahorran hasta un 80% con respecto a las normales. La tecnología LED es sinónimo de ahorro e incluso ha hecho que muchas administraciones cambiasen las luminarias urbanas para ahorrar.
Apuesta por los avances tecnológicos
La domotización de las casas o la tecnología inteligente es otra de esas cosas que suponen una inversión importante de primeras para un ahorro superior a medio y largo plazo. Hoy en día hay bombillas que regulan la intensidad de la luz, sensores de luz con detector de presencia y persianas inteligentes que suben o bajan en función del horario y la luz.
También con el sistema de calefacción podemos ahorrar regulando a la temperatura adecuada y usando sistema de climatización eficiente tanto para el invierno como en verano con el aire acondicionado. El mantenimiento de la caldera y el cuidado de los radiadores con purgados y dejándolos libres y sin barreras son otros puntos a favor en el aprovechamiento de su energía.