IglesiasEn el municipio de Trazo, se encuentra la Iglesia de San Cristovo de Xavestre, un templo religioso que combina siglos de historia y estilos artísticos que han ido modificando su apariencia desde la Edad Media.
Una miscelánea de estilos
Este pequeño templo ha evolucionado desde su origen románico del siglo XII hasta incorporar elementos góticos, barrocos y neoclásicos a lo largo de los años. A pesar de las reformas, todavía se conservan aspectos originales que nos trasladan al pasado. Su estructura básica inicial incluía una nave sencilla y un ábside rectangular, típicos del estilo románico. El acceso a la capilla mayor está marcado por un arco triunfal de medio punto, decorado con capiteles de motivos vegetales que, aunque desgastados por el tiempo, mantienen su belleza y singularidad.
Entre las transformaciones más destacadas está la adición de una capilla lateral en el siglo XV, promovida por la familia Araujo, y la construcción de una fachada neoclásica en 1804, coronada por un campanario cuadrangular que ahora domina el edificio. También destaca su retablo barroco, que reemplazó la ventana original del ábside en el siglo XVII, y las decoraciones exteriores, como los canecillos esculpidos en piedra, que muestran una maestría artesanal fascinante.
La iglesia no solo es un lugar de culto, sino también un testimonio vivo de la evolución arquitectónica de la región, conectada con otros templos románicos cercanos como San Pedro de Benza y Santa María de Chaián. Su rica ornamentación, fruto de influencias locales y protogóticas, la convierte en un imprescindible para los amantes de la historia y la arquitectura.
