La Iglesia de San Pedro de Leirado, que formó parte del Monasterio de Ramirás, es una destacada muestra del arte barroco de los siglos XVII y XVIII ubicada en Quintela de Leirado.
Sobria y elegante
Construida entre 1664 y 1701, esta iglesia presenta una planta de cruz latina con tres naves separadas por columnas y cubierta de madera. El ábside está adornado con una bóveda de crucería, mientras que la sacristía cuenta con una bóveda de cañón que alberga un lavamanos en forma de cabeza.
El exterior de la iglesia es sencillo pero imponente, con una torre campanario de dos cuerpos rodeada de balaustradas de piedra decorada. La fachada incluye una hornacina con una imagen de San Pedro. Además, los alrededores conservan los restos de un antiguo Via Crucis, añadiendo un toque histórico al entorno.
En su interior, los retablos barrocos capturan la atención. El retablo mayor, una obra de Alonso López y Bernardo de Cores, se compone de un zócalo, tres cuerpos y un remate, exhibiendo escenas de la vida de la Virgen, el Nuevo Testamento y varios Santos. En el centro, destacan dos representaciones de San Pedro, una en su cátedra y otra en su martirio, complementadas por bajorrelieves de los evangelistas.
El sagrario, con más de dos metros de altura, esculpido meticulosamente con escenas bíblicas, es otra pieza notable. En su puerta, una miniatura de la Última Cena, la Adoración de los Pastores, el Nacimiento del Salvador y David y Goliat resalta por su detalle y belleza.