Ubicada en Xinzo de Limia, la iglesia de San Pedro de Solbeira es uno de los templos religiosos más significativos de la región de Limia. Junto a la iglesia se ubica el cementerio parroquial.
Un románico que perduró pese al fuego
Rodeada por la historia que envuelve la desecada Laguna de Antela y custodiada por la torre de A Pena, la iglesia representa uno de los destacados ejemplos de románico rural del siglo XII en Xinzo.
Lo más llamativo al acercarse a la iglesia son las bolas que decoran la portada y la fachada, extendiéndose hasta la posterior espadaña de doble campanario. Estos detalles, se dice, podrían tener raíces románicas, aportando un encanto único a la estructura.
A lo largo de los siglos, la iglesia ha experimentado modificaciones que narran su historia. En el siglo XVII, una ampliación buscó preservar el estilo románico, incorporando canecillos en la parte trasera. Sin embargo, el año 1915 dejó una marca imborrable cuando un devastador incendio afectó la iglesia. La reconstrucción implicó la reposición de la bóveda con cemento, pero aún persisten elementos que nos conectan con el pasado, como el curioso reloj de sol en la esquina del muro sur.
San Pedro de Solbeira de Limia se erige no solo como un lugar de culto, sino como un testigo del devenir del tiempo y las comunidades que la han cuidado a lo largo de los siglos. Su ubicación estratégica, su arquitectura románica y las huellas de su evolución a lo largo de los años hacen de esta iglesia un punto de referencia histórico en la rica tradición de la comarca de A Limia.