En el concello de Antas de Ulla, se encuentra la Iglesia de Santa Mariña do Castro de Amarante, un lugar donde la historia y la arquitectura se entrelazan de forma fascinante.
Sobre los restos de un castro
Este templo, edificado sobre un antiguo poblado castrexo, destaca por su legado arqueológico, ya que en la zona se han encontrado diversos sarcófagos, algunos de ellos con sus cubiertas intactas. Aunque su origen es románico, la iglesia ha sufrido numerosas transformaciones a lo largo de los siglos. Una de las más significativas tuvo lugar en el siglo XVII, con la construcción de la capilla-mausoleo de los condes de Torre-Penela.
Este espacio, de planta hexagonal y completamente abovedado, fue encargado por don Juan Vázquez de Taboada y su esposa, doña Inés de Lemos Rivadeneira. Sus figuras orantes y los escudos familiares, que adornan tanto la capilla como el templo, son una muestra del refinado trabajo escultórico de la época.
Uno de los elementos más destacados es el arco triunfal románico, un vestigio del diseño original. Sus capiteles, tallados con esmero, no solo muestran motivos vegetales, sino también escenas figurativas únicas. Entre ellas, se encuentra una representación temprana de juglares tocando instrumentos, acompañados de bailarinas que parecen cobrar vida en la piedra. Este tipo de decoración, cuidadosamente planificada y con un alto nivel de detalle, demuestra una conexión con las influencias compostelanas, como las que se pueden observar en la catedral de Santiago.