Monumentos
Cada año el barrio ferrolano de Canido rinde un homenaje a una de las obras más importantes del pintor español Velázquez dando lugar a uno de los festivales más esperados dentro de la cultura urbana de Galicia.
El origen de las pinturas de las Meninas
En las sucesivas ediciones del festival han participado numerosos artistas locales e internacionales que durante tres días plasman su particular versión del cuadro de Las Meninas en las paredes del barrio de Canido.Este evento tan conocido culturalmente surgió en el año 2008 gracias al pintor ferrolano Eduardo Hermida, el cual decidió acabar con el abandono que estaba sufriendo la ciudad aportando arte a uno de sus barrios más conocido: el barrio de Canido. Todo comenzó cuando este artista decidió dar color a las grises paredes del barrio pintando sobre ellas una menina. Este simple acto reivindicativo desembocó en un total de 300 meninas que hay en la actualidad pintadas sobre las fachadas de las casas del barrio. De esta forma, el barrio de Canido pasó de ser uno de los más olvidados de la ciudad y, por lo tanto, de los menos visitados a uno de los más famosos, llegando incluso a convertirse en el único objetivo de los turistas durante su visita en la ciudad.
Y es que, tras su primera pintada, Eduardo Hermida convocó a otros amigos de la profesión a decorar las calles del barrio de Canido con pinturas que recuerden al famoso cuadro de Las Meninas de Velázquez. A partir de ese momento, cada primer fin de semana de septiembre se celebra un festival de cultura urbana en Ferrol donde numerosos artistas se dan cita para hacer nuevas obras.
En la actualidad, una de las actividades obligadas cuando se visita la ciudad de Ferrol es realizar la ruta de las Meninas de Canido, donde se pueden encontrar meninas de todos los colores, tamaños y mensajes reivindicativos que decoran desde paredes de viviendas en desuso, mobiliario urbano e, incluso, tiendas comerciales.
Resurgimiento del barrio de Canido
Sin duda, Las Meninas de Canido se han convertido en una seña de identidad de este barrio ferrolano que ha visto como sus visitas se han incrementado en los últimos años y como la actividad económica ha vuelto a esta zona de la ciudad, dando lugar al nacimiento de nuevos establecimientos locales. El acto reivindicativo de Hermida ha servido para cambiar el destino de este barrio de Ferrol, el cual se estaba convirtiendo en una zona despoblada y deteriorada una imagen que no tiene nada en común con la actualidad ya que ahora sus calles lucen llenas de color en las fachadas y de visitantes dispuestos a conocer todas y cada una de Las Meninas de Canido.
