En el monte Agüeiros, cerca del Castro de Penalba, se encuentra la Laxe da Rotea de Mendo, un interesante conjunto de grabados rupestres que constituye uno de los mayores atractivos arqueológicos de Campo Lameiro, en Pontevedra.
La representación prehistórica de un ciervo
Este lugar forma parte del rico patrimonio del Parque Arqueológico de Arte Rupestre, una parada obligatoria para los amantes de la historia y la naturaleza. El grabado más destacado es la figura de un ciervo macho en pleno bramido, una imagen que evoca la conexión ancestral entre el hombre y la fauna. Trazado con gran detalle, el ciervo se representa con sus cuernos erguidos y la cabeza alzada, en un gesto que sugiere un llamado hacia otra figura que podría representar a una hembra. A su alrededor, se aprecian círculos concéntricos, otros cérvidos y formas que podrían ser antropomorfas, aunque algunas interpretaciones varían.
Además, en la roca se distinguen grabados realizados en épocas posteriores, como dos figuras que parecen bailarinas, las cuales despiertan el interés y el debate entre investigadores. Estas representaciones convierten a la Rotea de Mendo en un ejemplo vivo de la evolución del arte rupestre en Galicia, desde el III milenio a.C. hasta periodos más recientes.