La playa de Compostela se encuentra en el centro de la ciudad de Vilagarcía de Arousa, a continuación de la playa de la Concha y bordeada por el paseo marítimo. Hay también quién la conoce como la playa de Carril. Desde la playa se tienen muy buenas vistas de la isla de Cortegada y de la desembocadura del río Ulla. Es un arenal desde el que se puede apreciar también la actividad marisquera de la zona en las diferentes bateas de a la ría.
Playa urbana y concurrida
La playa de Compostela es un arenal recto y una longitud de más de 2000 metros. Llama la atención, además de por su longitud, por ser una playa bastante ancha. Esto permite en su zona más próxima al paseo marítimo contar con zonas de juego infantiles y para la práctica de deportes como el vóley playa. También hay un espacio de gimnasia al aire libre. Tal tamaño es posible gracias a que en los 90 se reforzó la playa con un aporte extra de arena para que recuperase la imagen primitiva de la playa de Arealonga, nombre con el que era conocido este arenal en el pasado. Esta actuación hizo difícil establecer los límites entre la actual playa de Compostela y la de la Concha.
Tanto la playa de la Concha como la Compostela, son unas playas urbanas con forma rectilínea, de aguas tranquilas, poco ventosas, amplias y limpias. Su arena es gruesa. Además, el hecho de estar en pleno centro urbano de Vilagarcía de Arousa, hace de ellas playas muy concurridas tanto en verano como en invierno, disfrutando de la costa y el paseo marítimo. Cuenta con diferentes locales de hostelería próximos.
En cuanto a servicios, podemos decir que la playa de Compostela es un arenal bastante completo. Al estar en centro urbano, goza de numerosos aparcamientos próximos y dispone de servicios de ducha, papeleras, accesibilidad para personas con movilidad reducida, pasarelas de madera, y servicio de socorrismo y primeros auxilios.
A pesar de que la playa de Compostela ha contado durante varios años con la distinción de bandera azul desde el año 2015 la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia ha arrojado la sombra de la duda sobre las aguas de esta zona al considerarlas no aptas para el baño por su baja calidad luego de los análisis realizados periódicamente en ella. Estos análisis se repiten con frecuencia con calidades diferentes a lo largo del verano en función de las corrientes y las mareas.
Una playa con historia
El origen de su nombre viene de que antiguamente a estas playas acudían muchos habitantes de Santiago de Compostela, ya que se encuentra a pocos metros de la estación del tren. El lugar fue elegido incluso para la instalación en el siglo XIX de un balneario que estuvo en funcionamiento hasta la década de los 60 del pasado siglo.
La red de ferrocarril que unía Santiago de Compostela y Carril, hoy integrado en el municipio vilagarciano pero que antaño fue un ayuntamiento independiente, fue la primera línea de tren de la historia de Galicia y era muy empleada no solo para llevar y traer productos de importación y exportación hasta la capital gallega que entraban por el puerto de Carril, sino también para llevar hasta la playa a las gentes compostelanas que estaban en buena posición económica y que hicieron de la playa de Compostela su arenal escogido para el verano.