La Plaza del Obradoiro es el corazón de la ciudad de Santiago de Compostela, su nombre deriva de los talleres de canteros que trabajaron en la construcción de la Catedral. Es el perfecto recibidor para aquellos que llegan al final de la ruta del Camino de Santiago y que ven en esta emblemática plaza compostelana la perfecta antesala para materializar el fin del camino en cuanto pongan un pie dentro de la catedral.
La Plaza del Obradoiro se encuentra situada en el casco histórico de Santiago de Compostela y es el centro monumental de la ciudad, en ella se encuentra situada la Catedral, el Pazo de Raxoi, el Hostal de los Reyes Católicos y el Pazo de San Xerome.
Los peregrinos que acuden a Santiago se quedan impresionados por las grandes dimensiones de la plaza del Obradoiro y por la grandiosidad de los edificios que la rodean. Ni qué decir tiene que la Plaza del Obradoiro es, sin ninguna duda, el lugar desde el que se tiran más fotografías de toda la capital gallega.
Estructura de la plaza
La plaza del Obradoiro se encuentra flanqueada por cuatro edificios:
El museo y el Palacio de Gelmírez, que se encuentran junto a la Catedral.
El Pazo de Raxoi, que está frente a la fachada de la catedral y es de estilo neoclásico. Este edificio lo ocupa el ayuntamiento y también es sede de algunas instituciones autonómicas, pero su uso fundamental es el de sede del gobierno municipal.
El Hostal de los Reyes Católicos, al norte de la plaza. Este edificio es hoy parador nacional y combina el estilo renacentista con el plateresco y fue construido como hospital de peregrinos por orden de los monarcas castellanos.
Frente al Hostal podemos contemplar el Colegio de San Jerónimo, que alberga el rectorado de la Universidad.
El centro de la Plaza del Obradoiro es el kilómetro cero del Camino de Santiago, y así lo distingue una plaza granítica perfectamente colocada. Dicha placa también hace mención a la consideración del Camino de Santiago como Primera Itinerario Cultural Europeo, una distinción otorgada en el año 1987 por parte del Consejo Europeo.
Las mejores vistas de la catedral
Mención aparte merecen las vistas a la fachada oeste de la Catedral de Santiago de Compostela, posiblemente la más reconocible y retratada del templo.
La catedral luce en lo alto de las majestuosas escaleras de doble tiro que le dan una grandiosidad al templo desde la plaza. Estas escaleras datan de principios del siglo XVII y son necesarias para salvar el desnivel existente entre la propia catedral y el Obradoiro.
Esta fachada es el lugar de las proyecciones y el espectáculo de fuegos y luces propio del día de Santiago Apóstol (25 de julio), por lo que la plaza del Obradoiro se abarrota en estas fechas de personas que se agolpan para vivir el espectáculo de la quema de la fachada en vivo y en directo.