Uno de los puentes que nos invitan a cruzar el río Arnoia a la altura de Allariz es el Puente de Vilanova, estructura que todavía hoy sigue siendo paso de tráfico coches.
Origen romano
Es este un puente con pasado romano, si bien su aspecto y vigencia actual se lo debemos a las modificaciones que en la Edad Media se hicieron en la estructura para que llegase hasta nuestros días, las principales en el siglo XV. La propia Orden de San Juan de Jerusalén flanqueó y vigiló este puente siglos atrás.
Esta estructura de piedra consta de dos grandes arcos de medio punto apuntados ligeramente y con una luz que en ambos casos supera los once metros, si bien uno es un poco más grande que el otro. El ancho del puente oscila entre los 230 y los 440 centímetros.
Se ubica en una excelente zona de paseo que invita a recorrer la orilla del río por sus zonas verdes y zonas de descanso entre árboles y hierba. También muy cercana al puente se encuentra la iglesia de Santa María de Vilanova.