Controlando la entrada por mar hacia Carnota se encontraba en la Edad Media una fortaleza hoy en ruinas que se conoce como la Torre dos Mouros. Su alta ubicación permitía un control total del entorno por tierra y por mar.
La fortaleza
La Torre dos Mouros se ubica en la parroquia de Santa María de Lira a una altura de 320 metros con respecto al nivel del mar. Se puede datar a comienzos de la Edad Media y su ubicación no estaba escogida al azar, pues desde ella se controlaba totalmente en visión de 360 grados desde el Monte Louro hasta el Cabo Fisterra.
Hoy el recinto amurallado está en estado ruinoso pero la estructura de la fortaleza contaba con un sistema de doble muralla que cerraba un recinto que alcanzaba las dos hectáreas, murallas que se cree eran de imponentes dimensiones tanto por alto como por ancho.
Interiormente la fortaleza contaba con un recinto principal y otro secundario más elevado y de más difícil acceso que hasta tendría su propio cierre perimetral. Se accedía al recinto a través de una entrada monumental orientada hacia el puerto de Lira.
Este lugar sirvió para defenderse de ataques de invasores como los de los vikingos, pero pasado el siglo XII dejó de tener valor al cesar el volumen de ataques, por lo que pasó a tener funciones más relacionados con la ganadería o la agricultura. Volvería a ser un lugar interesante en lo defensivo ya en el siglo XX al ser usado como punto de refugio para fugitivos en el contexto de la Guerra Civil española.