En la localidad de Os Blancos, encontramos el Yacimiento Paleocristiano de Ouvigo, un lugar que nos sumerge en una experiencia única. Rodeado por la exuberante naturaleza gallega, este enclave alberga una necrópolis y una intrigante edificación tardorromanas que despiertan la curiosidad de cualquier visitante.
Descubierto el siglo pasado
Explorar Ouvigo es sumergirse en un viaje a través del tiempo, donde la arquitectura antigua, la naturaleza exuberante y la tradición gastronómica convergen para ofrecer una experiencia inolvidable. Este rincón de la Limia invita a los viajeros a descubrir los secretos que yacen entre sus ruinas. El lugar fue descubierto y dado a conocer al gran público en el año 1971 por Antonio Rodríguez Colmenero.
Entre los vestigios de este lugar, se destacan los restos de un antiguo santuario paleocristiano dedicado a San Breixo, conocido cariñosamente como el "Santo Vello". Este lugar sagrado se yergue junto a la antigua necrópolis, creando una atmósfera cargada de historia y misticismo. A pocos pasos, el imponente pazo de Arroxo, una hermosa casa con escudo de armas y torre, añade un toque de elegancia a la región.
El Museo Arqueológico de Ourense guarda algunos de los hallazgos de este yacimiento como parte de su valiosa colección. Así, allí se guarda celosamente la "píxide" de Ouvigo. Este objeto del siglo XIII, descubierto en el mismo yacimiento arqueológico, era utilizado para resguardar la eucaristía o transportar provisiones, revelando la riqueza cultural de la zona en esa época.