En la parroquia de Rodís (Lalín), se encuentra la Antigua Fábrica de Papel de Rodís, un rincón lleno de historia y encanto industrial. Este enclave no solo fascina por su historia y arquitectura, sino también por la conexión con la naturaleza y la sensación de viajar al pasado.
En la ribera del Barbán
La Antigua Fábrica de Papel de Rodís es un destino ideal para quienes buscan conocer los vestigios del pasado industrial gallego en un entorno sereno y rural. Este imponente edificio de sillería de piedra, con techo a dos aguas y más de medio centenar de ventanas, se alza junto a las tranquilas riberas del río Barbán, un afluente del Arnego. A su alrededor, se distribuyen varias construcciones más pequeñas que formaban parte del complejo.
Se estima que esta fábrica comenzó a producir papel alrededor de 1850, posiblemente con la participación del arquitecto Juan Cendón Carballal, quien dejó su huella en otras fábricas gallegas. Durante su breve periodo de actividad, el papel se elaboraba principalmente con trapos, y el trabajo recaía, en gran medida, en manos femeninas. Este modelo artesanal no pudo competir con la llegada de las técnicas industriales de fabricación de papel a partir de madera en 1880, lo que marcó el declive de este tipo de fábricas.
Hoy, una de las antiguas salas de secado de esta fábrica ha sido rehabilitada como vivienda, otorgándole una segunda vida. Pero la visita a este lugar no termina en el edificio. En sus alrededores, te espera una joya botánica: un majestuoso árbol del incienso que, con más de 200 años de antigüedad, es único en Galicia.