Yacimientos arqueológicos
MiradoresEl Castelo de Mos se encuentra en la Serra do Galleiro, en el límite entre los municipios de Mos y Ponteareas. Ubicado en un punto estratégico sobre el Monte Castelo, a 540 metros de altura, este antiguo enclave defensivo dominaba el valle del río Louro y las rutas que recorrían Galicia de norte a sur.
El recuerdo de lo que fue un gran castillo
Aunque hoy solo se pueden ver escasas ruinas de la fortaleza, la ubicación nos habla de su importancia histórica como punto de vigilancia y refugio frente a invasores y conflictos. La fortaleza del Castelo de Mos se asentaba en una elevación rocosa, aprovechando las formaciones naturales para proteger a sus habitantes. El recorrido hasta este lugar nos lleva a un entorno de grandes peñascos graníticos y pequeñas cavidades que servían de resguardo.
Aún se pueden apreciar marcas y rebajes en las rocas, señales de los antiguos sillares que alguna vez conformaron las estructuras defensivas. El lugar se divide en dos áreas: O Castelo y O Castelo Pequeno. En el primero se encuentran los principales restos, mientras que en el segundo, a pesar de su proximidad, las huellas de la construcción son más escasas.
A pesar de la falta de información precisa sobre su construcción y sus habitantes, se cree que la fortaleza pudo ser utilizada entre los siglos VI y IX, durante la dominación sueva. Posteriormente, como muchos otros castillos gallegos, es probable que fuera destruido durante las revueltas Irmandiñas o incluso antes, quedando relegado al olvido.
Llegar al Castelo de Mos no es sencillo, ya que no hay carreteras asfaltadas que conduzcan directamente al lugar. La mejor manera de acceder recorrer las pistas forestales que atraviesan el bosque andando o en bici de montaña.
