Castillo de Sobroso

El castillo de Sobroso se encuentra situado en el Monte Landín, ayuntamiento de Mondariz. Es una fortaleza medieval localizada a más de 300 metros de altura y de cuya gestión se encarga actualmente la Diputación de Pontevedra, que trabaja en la musealización del edificio. Está declarado Bien de Interés Cultural y Monumento Nacional desde 1949.

Orígenes del Castillo

Los orígenes del Castillo de Sobroso o, como se conocía en la antigüedad, Sovoroso, se remontan al siglo X cuando Bermudo II se refugió en él durante la batalla con las tropas de Ramiro II, rey de León. Se cree que el castillo se levantó en un espacio antes ocupado por un Castro en una etapa en la que el cristianismo se extendió con rapidez por la península. Ya en los tiempos de Alfonso V fue conquistado y saqueado por Almanzor.

En el año 1095 Doña Urraca y Don Raimundo de Borgoña concedieron el castillo de Sobroso al obispo de Tui. Son años estos de importancia para la fortaleza y en los que aparece documentada por primera vez en la "Historia Compostelana". En ella se cuenta que en el año 1117 la reina Doña Urraca se encontró refugiada y cercada en la fortaleza de Sobroso por lo partidarios de su hermana Doña Teresa y su hijo Alfonso VII. La monarca consiguió escapar a Compostela, por un pasadizo subterráneo que comunica el castillo con el río Tea, en busca del auxilio del arzobispo Gelmírez.

A la muerte de la reina los nobles gallegos proclaman rey de Galicia en el Sobroso a su hijo Alfonso. En el siglo XIII perteneció a la familia de los Sobroso, en 1386 fue entregado por Pedro I a Álvaro Pérez de Castro y en 1379 Juan I concede el señorío de Sobroso a Pedro Ruíz Sarmiento.

En el año 1396 don Juan I de Castilla concedió la jurisdicción del castillo a don Pedro Ruiz Sarmiento, señor de Ribadavia, pasando a ser el castillo del condado de Salvatierra con el rango de marquesado. En esta época es cuando se convirtió en una gran fortaleza.

El asedio Irmandiño

Entre los años 1467-1468 el castillo fue destruido durante las revueltas irmandiñas y sufrió las luchas nobiliarias entre los linajes de los Sarmiento y Soutomaior. Fue reconstruido por Diego García Sarmiento en su configuración actual, pero de nuevo las luchas lo hacen cambiar de dueño. Primero fue Pedro Madruga el que se hizo con la fortaleza, pero su cautiverio en Benavente le hizo perderlo. El castillo de Picaraña, situado muy cerca, es parte de la estrategia del propio Madruga por recuperarlo años después.

Tras sobrevivir a dos órdenes de derribo por parte de los reyes Católicos, en el siglo XVIII el castillo pierde su papel defensivo, cayendo en el abandono. En el año 1923 lo compró Alejo Carrera Muñoz y lo restauró con su propia fortuna y en el año 1981 lo adquirió la administración para convertirlo en museo etnográfico y parque natural.

¿Cómo es el castillo?

El castillo lo conforman tres elementos principales. La cerca exterior, el cuerpo residencial de dos plantas que está destinado a las habitaciones y salones y la Torre del Homenaje de 13 metros y en forma de L. Todas sus partes, a diferentes alturas, son perfectamente distinguibles desde el exterior.

Está rodeado por una robusta muralla con cubos circulares de defensa, en el recinto hay un patio de honor y una capilla románica de planta rectangular. En la puerta de entrada podemos ver los escudos de los Sarmiento y de los Valladares.

Todo el edificio, que únicamente puede ser atacado por un flanco desde el que se tiene visión directa si se sube a la Torre del Homenaje, está rodeado por una amplia zona verde de unas 30 hectáreas y en las que el valor forestal es notable por la riqueza de hasta 40 especies diferentes que conviven en el bosque. Los robles, los frutales y los alcornoques son las especies más importantes de esta zona en la que hay trazada también una pequeña ruta de senderismo.