Conventos y MonasteriosLa iglesia de San Salvador de Asma es un edificio religioso que forma parte del conjunto de San Salvador de Asma, en Chantada. Se cree que este edificio de finales del siglo IX fue levantado sobre los restos de otra construcción religiosa o defensiva de origen prerrománico.
Origen
Aunque no existe una certeza, se cree que el Monasterio de San Salvador de Asma fue fundado a finales del siglo IX por los monjes benedictinos, sobre las ruinas de un castillo que defendía aquellas tierras de los invasores normandos. Durante largos años, los monarcas de la Baja Edad Media protegieron y ampararon con sus donaciones y ordenanzas los bienes del monasterio.
Las referencias históricas apuntan a la construcción del edificio por parte de una pareja de nobles y el monasterio se mantuvo dúplice hasta bien entrado el siglo XI. Ya en el siglo XII la orden del Cluny toma las riendas del edificio hasta que éste pierde su valor tras las desamortizaciones.
El Monasterio en la actualidad
Si en la actualidad queremos visitar este monumento, también conocido popularmente por El Convento, solamente podremos contemplar su iglesia, ya que los restos del cenobio están en manos privadas.
La primera edificación de la iglesia es de finales del siglo XII, aunque se realizaron ligeras reformas en el siglo XVI. La fachada actual es más moderna y se levantó en el siglo XIX, si bien se reutilizaron algunas piezas de anteriores edificaciones como, por ejemplo, las ventanas o algunos elementos del interior que pueden ser incluso prerrománicos.
El priorato del antiguo monasterio, data de los siglos IX o X. El edificio consta de una sola nave con cubierta de madera en la que se constató la existencia de varios nichos de época bastante antigua.
El ábside tiene elementos que lo hacen muy interesante. Su cubierta se presenta en forma de artesonado radial con un gran escudo en la parte central símbolo de la Real Orden de Valladolid de dónde se cree que procede. Además de esto, posee un gran retablo de finales de siglo XVI que se cree obra de la Escuela de Berruguete y que en la actualidad acaba de ser restaurado en su totalidad. El retablo es de madera policromada y está presidido por el Salvador, con imágenes añadidas de la Adoración de los Reyes Mayos y de la Natividad.
Otro de los retablos destacados del templo es el dedicado a San Benito ubicado hoy en una zona estratégica para tapiar el paso hacia lo que fue el Claustro del monasterio, que como se ha explicado anteriormente es de titularidad privada y no se puede visitar. Otros elementos importantes de la iglesia son la pila bautismal medieval y el retablo del Niño Jesús de Parga.
