Los amantes de la historia, el arte y la naturaleza, tienen una cita obligada en el concello de Pantón para visitar los Sarcófagos O Preguntoiro. Estos enigmáticos monumentos, excavados en la roca son un testimonio vivo de los inicios del monacato en la impresionante región de la Ribeira Sacra, famosa por su belleza paisajística y su valioso patrimonio.
Un Paseo por la historia
Estos sarcófagos tienen sus raíces en la época medieval, específicamente entre los siglos VIII y XI. Se cree que fueron el último hogar de una comunidad de eremitas que eligieron este lugar apartado y sagrado como su morada. Existe una hipótesis que sugiere que estos eremitas podrían haber sido los fundadores del cercano monasterio de Pombeiro, que aún se conserva parcialmente y alberga una impresionante iglesia románica de gran valor artístico.
Para llegar a los Sarcófagos O Preguntoiro, debes seguir un sendero que parte de la apacible aldea de Cibrisqueiros. Este camino serpentea por la empinada ladera del valle del río Sil. Aunque estrecho y sombrío, te recompensará con vistas espectaculares del majestuoso cañón del Sil y sus pintorescos viñedos. El recorrido abarca aproximadamente 700 metros y toma alrededor de 20 minutos.
Al final del sendero, te aguardan los cuatro sarcófagos, cada uno con su propia historia que contar. Uno de ellos permanece sin terminar, mientras que otro conserva la losa original que lo cubría. Estos sarcófagos tienen la forma de un ser humano y están dispuestos de este a oeste, siguiendo la tradición cristiana. Junto a ellos, descubrirás una pila bautismal tallada en la roca y los vestigios de una capilla dedicada a San Xoán Degolado, construida posteriormente para preservar la sacralidad del lugar.