Un pedazo de la historia de la capital de España se encuentra en el municipio de O Porriño. Se trata del templete de San Luis, arco que daba acceso a comienzos del siglo pasado a una de las primeras líneas de metro de Madrid en la parada de metro de la red de San Luis que comunicaba norte y sur de la ciudad. Era la primera línea de metro de la ciudad.
Antonio Palacios
El arquitecto que se encargó de diseñar el gran arco que hoy luce en el Campo da Feira de O Porriño no fue otro que Antonio Palacios, profesional afincado en la capital, pero porriñés de nacimiento. Su trabajo data del año 1919, pues la línea de metro a la que daba acceso esta gran puerta mantuvo operativo el arco desde la década de los 20 hasta el año 1970.
La puerta de acceso te llevaba hasta la estación subterránea de metro por medio de unas escaleras de caracol. En noviembre de 1920 se sumó a las escaleras el funcionamiento de un ascensor para el que era necesario contar también con un billete si se quería hacer uso del mismo a un precio de cinco céntimos de peseta, lo que equivalía aproximadamente a un tercio del coste del billete de metro en la época.
La parada de metro equivalente actualmente a esa primitiva línea pionera en el metro de Madrid sería la de Gran Vía, que incluso recientemente (2021) ha remodelado su estación tratando de replicar la vieja puerta con ascenso en el cruce con la calle Montera. Existió mucho antes, en la década de los 80, un proyecto para retornar el templete a su lugar original pero finalmente el proyecto no llegó a buen puerto.
Traslado a su ciudad
En Porriño no hay metro ni nada que se le parezca, pero sí quisieron rendir homenaje a una de las grandes personalidades del municipio y la mejor forma que se les ocurrió fue aprovechar el arco del Templete de San Luis desmantelado en 1970 para, un año después, llevárselo hasta su pueblo de origen para colocarlo en el Campo da Feira o Jardines del Parque Domingo Bueno.
El diseño de la puerta es el de un gran templete levantado en granito y con una cubierta de tipo marquesina hecha con hierro y con cristal, si bien hoy ese cristal ya no está presente en Porriño. Se encuentra en una zona verde con un pequeño camino de arena que nos invita a pasar por debajo del arco. Un pequeño monolito con placa en la parte frontal del templete nos da la información sobre qué es lo que tenemos delante de nosotros.