En la parroquia de A Proba de Burón, próxima a la capital de A Fonsagrada, yace la antigua fortaleza de la Torre de Burón, tesoro histórico en la provincia de Lugo. Esta reliquia medieval, integrante del patrimonio cultural gallego, atesora enigmas y leyendas cautivadoras.
Destruida y renacida
Construida en el siglo XV, la Torre de Burón se atribuye a los Condes de Altamira, quienes la erigieron como defensa ante las revueltas irmandiñas. A pesar de haber sido destruida en 1467 por los irmandiños, la fortaleza renació gracias al empeño de Doña Urraca de Moscoso, consorte del Conde de Altamira.
Durante siglos, la torre fue testigo de la intrincada historia gallega hasta su abandono. En la actualidad, solo persiste una de sus torres, de unos 15 metros y tres niveles interiores, junto a vestigios de la muralla. Si bien no se permite su acceso por ser propiedad privada, su majestuosidad y arquitectura medieval pueden admirarse desde afuera.
Ubicada en O Chao, la aldea también alberga una capilla barroca dedicada a San José y la iglesia parroquial de Santa María Magdalena. La zona, atravesada por peregrinos del Camino Primitivo a Santiago de Compostela, ofrece un paisaje natural de cascadas, montañas y valles de una belleza inigualable.