IglesiasLa Iglesia de la Virgen Peregrina es una de las edificaciones más emblemáticas y representativas de la ciudad de Pontevedra. Se encuentra situada en la Plaza de la Peregrina, actualmente, pleno centro de la ciudad.
Las obras de construcción del templo se iniciaron en el s. XVI, concretamente en el año 1778, de la mano del arquitecto portugués Antonio Souto para honrar a la Virgen de la Peregrina, patrona de la provincia de Pontevedra así como del Camino de Santiago Portugués. La Iglesia de la Virgen Peregrina ha sido declarada como Monumento Histórico-Artístico en 1982 y Bien de Interés Cultural en 2011.
¿Cómo es el Santuario de la Peregrina?
Su fachada está coronada por una imagen alegórica de La Fe así como por dos torres exactamente iguales que se erigen a ambos lados del templo. La de la izquierda, más conocida como torre norte, fue derribada por un rayo en el año 1795 por lo que tuvo que ser restaurada. Para evitar más problemas de este tipo en el futuro, se colocó un pararrayos que garantizase la seguridad y la perfecta conservación del templo a lo largo de los años. A esta torre también se le añadió en el año 1896, un reloj procedente del Hospital de San Juan de Dios, edificio muy característico de la ciudad pontevedresa y que había sido demolido. También se instalaron en la Capilla las campanas del Hospital.
Otros de los elementos más característicos de esta fachada, que combina el estilo barroco con elementos neoclásicos, son las imágenes de la Virgen, Santiago Apóstol y San Roque, vestidos de peregrinos.
Además, el exterior de la iglesia está precedido por un atrio con escaleras y, al pie de las mismas, se encuentra una fuente de tres caños sobre la que descansa la figura de Teucro degollando al león de Nemea.
Planta en forma de concha
En su interior, la Iglesia de la Virgen Peregrina presenta una planta en forma de concha de vieira, símbolo de los peregrinos, con finalización en cruz en la que se encuentra la Sacristía. Su altar es de estilo neoclásico y, en su parte superior, se observa un relieve que representa la huida a Egipto y la imagen de la Virgen Peregrina con el Niño Jesús en brazos. Además, también destacan las pinturas de Santa Clara, de Polanco y una copia de la Virgen de San Onofre de Roma de Peruzzi así como la pila de agua bendita del vestíbulo. Es una concha de Tridacna de grandes dimensiones donada por el almirante Castro Méndez Núñez tras regresar de una de sus grandes travesías por el Océano Pacífico.
A lo largo de la historia, se han realizado diferentes restauraciones en la capilla para mantenerla en un buen estado de conservación. Una de las obras más importantes se llevaron a cabo durante 1981 ya que el templo presentaba daños estructurales, grandes grietas producidas por un desplazamiento en los cimientos. La última reforma tuvo lugar en 2008, en el que se ejecutaron tareas de restauración de muros, vidrieras, pinturas o en el reloj de la torre.
En la actualidad, la Iglesia de la Virgen Peregrina está administrada por la Cofradía de la Peregrina quien se encargó de costear su construcción y continúa haciéndose cargo de su conservación y mantenimiento del culto.
