La visita a las ruinas del antiguo hospital de Montouto sirve para adentrarse en una narrativa histórica que abraza la esencia cultural y el legado jacobino arraigado en Galicia por siglos. Este hospital, ubicado en la sierra de A Fonsagrada, Lugo, tiene raíces que se remontan a 1357, fundado por el rey Pedro I de Castilla para acoger y asistir a peregrinos que transitaban por el Camino Primitivo hacia Santiago de Compostela.
Mudanza
La historia del hospital se reconfiguró en 1698 durante el reinado de Carlos II, moviéndose desde su emplazamiento original cerca del menhir de Peña Labrada hacia el lado del dolmen de Montouto. Esta nueva posición estratégica colocó al hospital en la encrucijada de dos rutas del Camino Primitivo, siendo el primer refugio para los peregrinos que ingresaban en Galicia antes de iniciar un descenso pronunciado hacia Paradavella.
A mediados del siglo XX, cesó su función hospitalaria y quedó deshabitado, transformándose en ruinas. A finales de los 90, se ejecutaron trabajos para restaurar parcialmente muros, edificaciones y el manantial que solía saciar la sed de los viajeros. Sin embargo, gran parte de las instalaciones permanecen en estado ruinoso y amenazadas por el tiempo.
Junto a estas ruinas se erige una capilla moderna dedicada al apóstol Santiago, erigida en 1993. Cada 25 de julio, el lugar se llena de vida con una romería en honor al santo, congregando a locales y forasteros.