La Iglesia de Santa María de Reza se encuentra dentro del límite municipal de Ourense, concretamente a las faldas del monte Santa Ladaíña. Desde el lugar se puede disfrutar también de unas vistas espectaculares sobre el río Miño.
Origen románico
Este templo, de origen románico, ha sido testigo del paso del tiempo desde que se mencionó por primera vez en documentos del siglo XIII. Pese a esas raíces románicas, la iglesia ha sido objeto de varias reformas que han incorporado elementos de los estilos barroco y neoclásico. A pesar de estas modificaciones, aún se pueden observar algunos vestigios de su pasado medieval, como los canecillos decorados con motivos geométricos y figuras, destacando una cabeza de cerdo y una humana en el muro sur. En el interior, se conservan también los modillones que sostienen la tribuna, así como una antigua pila bautismal de estilo románico.
En su interior se venera a la Virgen de Reza, una talla de madera policromada también del siglo XIII, que en su día perteneció al Tesoro de la Catedral de Ourense y que se considera clave para fechar la construcción original de la iglesia. Uno de los aspectos más fascinantes de la imagen venerada de Nuestra Señora de Reza, es que se trata de una estatua de origen inglés que fue traída a Galicia tras la disolución de los monasterios ordenada por Enrique VIII en la primera mitad del siglo XVI. Esta imagen fue adquirida en Vigo por el Arcediano de Varoncelli, Don Alfonso Fonseca Ulla, y trasladada a Reza durante una plaga que asolaba la zona. Tras la llegada de la Virgen, la peste cesó milagrosamente, lo que consolidó la fama de la estatua como protectora contra todo tipo de males, incluidas las sequías que afectaban a la región.