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Descubre Triacastela Que ver y que hacer en Triacastela (16)

Descubre que ver y que hacer en Triacastela y los lugares mágicos que no te puedes perder. Información detallada, localizaciones y mucho más.

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Qué ver y hacer en Triacastela, una parada imprescindible para los peregrinos

Ubicado en el corazón del Camino de Santiago, el municipio de Triacastela es un destino lleno de encanto y tradición. Desde la histórica Iglesia de Santiago hasta la misteriosa Cova Eirós, este pequeño pueblo gallego ofrece una rica mezcla de patrimonio cultural y belleza natural. Pasea por sus calles empedradas, descubre antiguos hospitales de peregrinos y disfruta de la hospitalidad local. Triacastela es una parada imprescindible para los peregrinos y amantes de la historia. Esto es todo lo que puedes ver y visitar en Triacastela.

Una cueva prehistórica

Triacastela alberga las Cuevas de Eirós, espacio arqueológico crucial en Galicia. Descubiertas en los años 80, estas cuevas, declaradas Bien de Interés Cultural en 2012, revelan restos humanos de más de 35.000 años. Destacan por el arte rupestre del Paleolítico superior y cerámica única, conectada con antiguos pastores ibéricos. Además, preservan restos de osos de las cavernas, enriqueciendo su valor biológico. Localizadas en la ladera del monte Penedo a 780 metros sobre el nivel del mar, las cuevas se exploran a través de una entrada amplia que conduce a una sala con arte rupestre. Aunque este espacio sigue en investigación, Eirós ya es un espacio fundamental para entender la transición entre Neandertales y Homo Sapiens.

El legado del Camino

Triacastela es una de las estaciones de paso de los peregrinos en su ruta por el Camino de Santiago en su ruta francesa y por ello no puede faltar en el lugar un templo dedicado al apóstol. La Iglesia de Santiago en Triacastela data del siglo IX. Originalmente dedicada a San Pablo y San Pedro, fue reformada en el siglo XVIII. Presenta planta rectangular con tejado a dos aguas de pizarra, ábside circular con bóveda de cuarto de esfera, y nave central de cañón dividida por un arco triunfal. Cuatro ventanales iluminan el interior, que incluye una sacristía añadida en el sur. Destaca la torre neoclásica con bajorrelieves de castillos de Triacastela y una imagen de Santiago a caballo. El interior alberga retablos neoclásicos, destacando uno con la Virgen Dolorosa y la Santa Faz, y una figura de Santiago Matamoros en terracota del siglo XVIII. El retablo mayor barroco, del final del siglo XVII, exhibe columnas salomónicas y un sagrario decorado con ángeles.

La importancia de la figura del peregrino en la zona queda patente en el monumento que se ha levantado en honor a estos visitantes. El monumento al peregrino data del año 1965 y refleja la costumbre peregrina de coger una piedra caliza de los yacimientos locales para llevarla hasta la parroquia de Castañeda, donde históricamente se elaboraba la cal que después era usada en la construcción de la catedral. Otro edificio vinculado al camino es la antigua herrería, construcción del siglo XVI (la más antigua de Triacastela) donde se reparaban objetos metálicos, se herraba a los caballos y se daba también uso como mesón para peregrinos.

La de Santiago no es la única iglesia de Triacastela que visitantes y peregrinos pueden conocer, aquí también tienes la oportunidad de acercarte a templos como: San Isidro de Lamas do Biduedo, San Cristóbal de Cancelo, San Salvador de Toldaos, Santalla de Alfoz, Santa María de Vilavella o Santa maría do Monte.

Ponemos punto y final a este pequeño repaso por los principales lugares de Triacastela que debes visitar no sin antes mencionar a uno de los árboles singulares no solo de esta población, sino también del propio Camino de Santiago. El Castaño de Ramil es un árbol con 800 años de historia en sus raíces y tronco, lleno de huecos y con ramas gruesas que decoran un tronco de ocho metros y medio de perímetro.